«Los beneficios que se pueden obtener con las técnicas radiológicas superan enormemente cualquier riesgo potencial derivado de la exposición a la radiación».
¿Qué es la radiología digital?
La radiología digital, o rayos X digitales, es un tipo moderno de radiografía que utiliza sensores digitales en lugar de película fotográfica, como es el caso en las radiografías tradicionales. La imagen capturada se convierte inmediatamente en datos digitales y está disponible para verse en unos segundos.
¿En qué consiste?
Los procedimientos para una radiología digital son muy similares a los de una radiografía tradicional, pero es una tecnología muy diferente. La radiación sigue pasando a través del cuerpo, formando una imagen basada en la cantidad de radiación que pasan los diferentes órganos, pero la diferencia está en que se utilizan sensores digitales para capturar la imagen, en lugar de la película fotográfica.
La claridad de las radiografías digitales las hace mejores que las tradicionales cuando se trata de encontrar pequeñas fracturas e imperfecciones en los dientes.
Las radiografías digitales tienen varias ventajas sobre otras opciones:
Las radiografías muestran la anatomía del cuerpo humano en escalas de grises. Estos grises son más oscuros en las áreas que no absorben bien la radiación y más claros en áreas densas (como los huesos) que absorben bien la radiación.
La capacidad de diagnóstico de los rayos X se suele ver aumentada en determinados casos por el uso de contrastes, sustancias no nocivas que se introducen en el paciente vía oral, vía intravenosa (inyección) o vía rectal (enema).
Los estudios con rayos X no causan dolor, se obtienen con suma rapidez y muchas veces son el complemento a otras modalidades radiológicas.
¿Cuándo están indicadas las radiografías?
La realización de radiografías está regulada para que la radiación sea la mínima necesaria. Además, no se puede establecer una relación directa entre cáncer y radiación.
Los niños pequeños y los fetos son más sensibles a los riesgos de los rayos X, por lo tanto, si la paciente está embarazada o sospecha que pueda estarlo, debe comunicárselo al su médico.
Es imprescindible no llevar joyas y permanecer quieto cuando se esté tomando una radiografía, ya que el movimiento puede provocar imágenes borrosas. Por este motivo, en ocasiones se requiere contener la respiración durante uno o dos segundos.
Indicaciones más frecuentes de esta prueba: